Con G de gabardina

El manual del estilo ‘sans effort’: la elegancia del trench

Gabardina. Sustantivo, femenino. Prenda de vestir impermeable, de manga larga, que cubre el cuerpo hasta la rodilla, va abierta por delante y se pone sobre otras prendas para protegerse de la lluvia o el viento. La gabardina de Cortefiel es una de las prendas más icónicas de la marca y siempre presente en sus colecciones tanto para hombre como para mujer.

Aunque la moda nos resulte interesante porque siempre está en continua evolución, no cabe duda que hay prendas que se resisten a las tendencias efímeras y forman parte de nuestro fondo de armario. Un buen básico es siempre garantía de una imagen con estilo y este es, precisamente, el caso de la gabardina.

Esta prenda exterior nacida en las trincheras de la I Guerra Mundial – de ese primer uso viene la palabra trench – ha logrado convertirse a lo largo de los años en una pieza fundamental de nuestro ropero, sin la que es difícil imaginar una primavera o un otoño con estilo. Con más de un siglo de vida desde su primer diseño y utilidad en tiempos de guerra, la gabardina no tardó en saltar a la gran pantalla y de ahí a la calle, como una pieza de estilo verdaderamente atemporal.

También es, por supuesto, una de las prendas más icónicas de Cortefiel. Presente en las colecciones de la marca desde los años 60, primero en versión masculina y posteriormente para la mujer, el trench de Cortefiel conquistó públicos internacionales y ha evolucionado en cuanto a tejidos, cortes, estilos, colores y acabados. Pocos saben que la verdadera popularidad de esta prenda se la debemos al cine y concretamente a dos películas emblemáticas: ‘Casablanca’ y ‘Cantando bajo la lluvia’.

Humphrey Bogart y Gene Kelly, respectivamente, vestidos con una clásica gabardina con solapa de tono beige, fueron los primeros responsables de que la prenda saliera de las contiendas del campo de batalla y trascendiera del gran celuloide a la moda de calle. Aunque en un principio la gabardina, una vez popularizada, solo aparecía en las escenas de lluvia por el carácter impermeable de su tejido, pronto se convirtió en esa prenda versátil tal y como la conocemos hoy en día. Audrey Hepburn en ‘Desayuno con diamantes’, Meryl Streep en ‘Kramer contra Kramer’, Kim Basinger en ‘9 semanas y media’…innumerables actrices y películas de cabecera han contado con un trench en sus vestuarios. 

Pocos saben que Cortefiel también participó con su gabardina en el cine, aunque en pequeña pantalla… ¿Quién no se acuerda del mítico inspector Colombo interpretado por Peter Falk que conquistó las audiencias de todo el mundo entre los años 60 y 70? Uno de los ‘inseparables’ del detective más famoso de la televisión fue una gabardina de Cortefiel, coincidiendo con plena expansión de la marca en Estados Unidos. De corte hasta la rodilla, con botones de castaña brasileña, en un clásico color crudo y característicamente arrugada: Colombo creó toda una escuela de cómo llevar la gabardina con estilo desenfadado.

Hoy ese corte masculino e informal de Colombo sería digno hasta de looks más casual femeninos gracias al poder del lenguaje universal que desarrolló el trench en las últimas décadas… Cómoda, versátil, elegante y nunca fuera del lugar: la gabardina es una de las prendas capaces de animar cualquier look y acompañar en todas las ocasiones, creando un estilo ‘sans effort’ como denominan los franceses a la elegancia natural.

Estrella indiscutible de looks urbanos y perfecta para una jornada de oficina, la gabardina admite infinitas combinaciones que la posicionan entre lo clásico y el casual chic. Y Cortefiel ha creado todo un manual de estilo a lo largo de los años de cómo llevar la gabardina con elegancia y confort.